El año 2014 fue un año de cambios para la Unión Europea (UE). Se eligió un nuevo Parlamento Europeo y, por primera vez, se nombró al presidente de la Comisión Europea en función de los resultados de las elecciones al Parlamento. El elegido fue Jean-Claude Juncker, candidato del grupo político ganador. Tras las audiencias y el voto de aprobación del Parlamento en octubre, la nueva Comisión entró en funciones el 1 de noviembre y estableció un programa ambicioso basándose en las prioridades políticas presentadas por el presidente Juncker ante el Parlamento. El 1 de diciembre, el nuevo presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, tomó posesión de su cargo. Por primera vez, el Consejo Europeo quedaba así bajo la dirección de un ciudadano de uno de los Estados miembros que se
habían adherido a la Unión a partir de 2004. Por otra parte, en el contexto del fortalecimiento de la unión económica y monetaria (UEM), el Banco Central Europeo (BCE) asumió nuevos poderes para supervisar los bancos europeos.