La Unión Europea ya está estudiando una normativa que proteja el tráfico ferroviario de cualquier corte de vías. La interrupción de tráfico ferroviario por mantenimiento u obras nuevas siempre tendrá que planificarse con una alternativa que asegure el mínimo impacto sobre los usuarios habituales que utilicen la línea. De esta forma, se elaborará un modelo de buenas prácticas para los planes de contingencia en todos los países miembros. Este modelo se podrá utilizar para definir las posibles rutas alternativas.
Fuente: Granada Hoy