El Presidente Juncker anunció la creación de un Cuerpo Europeo de Solidaridad en el día de ayer en su discurso sobre el estado de la Unión: «En Europa hay muchos jóvenes con inquietudes sociales dispuestos a realizar una contribución significativa a la sociedad y mostrar su solidaridad. [...] La Comisión propone hoy establecer un Cuerpo Europeo de Solidaridad. Los jóvenes de toda la UE podrán realizar labores de voluntariado donde más se necesite su ayuda, a fin de responder a las situaciones de crisis, como la crisis de los refugiados o los recientes terremotos de Italia. Me gustaría que el Cuerpo Europeo de Solidaridad comenzase a funcionar a finales de este año. Y que en 2020 ya participen 100 000 jóvenes europeos. Al incorporarse voluntariamente a este Cuerpo Europeo de Solidaridad, estos jóvenes podrán desarrollar sus capacidades y conseguir no solo un trabajo, sino también una experiencia humana inestimable».
El Cuerpo Europeo de Solidaridad se ha concebido para ofrecer a los menores de 30 años en Europa la oportunidad de apoyar organizaciones no gubernamentales (ONG), autoridades locales o empresas privadas que se hayan mostrado activas en la resolución de situaciones de riesgo en la Unión Europea, como la exclusión social, la pobreza, los retos sanitarios y demográficos o trabajen en la acogida e integración de los refugiados. El Cuerpo Europeo de Solidaridad desarrollará su propia identidad, arraigada en los valores fundamentales de la UE de compromiso y solidaridad. Al incorporarse al Cuerpo Europeo de Solidaridad, los participantes manifestarán su compromiso y voluntad de dedicar un período de su vida a ayudar a los demás. Al apoyar a otras personas, incluidas las más vulnerables de nuestras sociedades y comunidades, los jóvenes no solo pondrán en práctica el valor fundamental de la UE de la solidaridad, sino también adquirirán competencias y experiencia, incluidos los conocimientos lingüísticos, que pueden ser valiosos a la hora de buscar trabajo o plantearse proseguir su educación y formación. El Cuerpo Europeo de Solidaridad se creará lo antes posible con el objetivo de conseguir que 100 000 jóvenes se hayan incorporado al cuerpo de aquí a 2020. Para más información, véase esta nota informativa con las preguntas más frecuentes: Q&A.
Preguntas y respuestas sobre el Cuerpo Europeo de Solidaridad
La Comisión propone hoy establecer un Cuerpo Europeo de Solidaridad. Los jóvenes de toda la UE podrán participar como voluntarios allí donde sea más necesario, para responder a situaciones de crisis. Me gustaría que el Cuerpo Europeo de Solidaridad entrara en funcionamiento lo antes posible.
¿Qué es el Cuerpo Europeo de Solidaridad?
Fue anunciado por el Presidente Juncker en su discurso sobre el estado de la Unión el 14 de septiembre de 2016: «La Unión Europea también puede contribuir a crear oportunidades para los jóvenes. En Europa hay muchos jóvenes con inquietudes sociales dispuestos a realizar una contribución significativa a la sociedad y a mostrar su solidaridad.[…] Estoy convencido de que se necesita mucha más solidaridad. Pero también sé que la solidaridad debe ser voluntaria, que debe provenir del corazón, que no puede ser forzada.[…] Con ese mismo espíritu, la Comisión propone hoy establecer un Cuerpo Europeo de Solidaridad. Los jóvenes de toda la UE podrán realizar labores de voluntariado donde más se necesita su ayuda, a fin de responder a las situaciones de crisis, como la crisis de los refugiados o los recientes terremotos de Italia. Me gustaría que el Cuerpo Europeo de Solidaridad comenzase a funcionar a finales de este año. Y que en 2020 ya participen 100 000 jóvenes europeos. Al incorporarse voluntariamente a este Cuerpo Europeo de Solidaridad, estos jóvenes podrán desarrollar sus capacidades y conseguir no solo un trabajo, sino también una experiencia humana inestimable.»
El Cuerpo Europeo de Solidaridad se ha concebido para ofrecer a los menores de 30 años en Europa la oportunidad de apoyar organizaciones no gubernamentales (ONG), autoridades locales o empresas privadas que se hayan mostrado activas en la resolución de situaciones de riesgo en la Unión Europea, como la exclusión social, la pobreza, los retos sanitarios y demográficos o trabajen en la acogida e integración de los refugiados.
El Cuerpo Europeo de Solidaridad desarrollará su propia identidad, arraigada en los valores fundamentales de la UE de compromiso y solidaridad. Al incorporarse al Cuerpo Europeo de Solidaridad, los participantes manifestarán su compromiso y voluntad de dedicar un período de su vida a ayudar a los demás. Al apoyar a otras personas, incluidas las más vulnerables de nuestras sociedades y comunidades, los jóvenes no solo pondrán en práctica el valor fundamental de la UE de la solidaridad, sino también adquirirán competencias y experiencia, incluidos los conocimientos lingüísticos, que pueden ser valiosos a la hora de buscar trabajo o plantearse proseguir su educación y formación.
¿Cómo funcionará y cuándo va a crearse?
El Cuerpo Europeo de Solidaridad se basará en los programas de voluntariado y profesionales de la UE para jóvenes ya existentes, así como en la movilización de las redes de empleo, educación y actores de la sociedad civil de toda Europa ya establecidas. Vamos a desarrollar el sistema en estrecha colaboración con los Estados miembros, las autoridades locales y las ONG.
Los candidatos que deseen integrarse en el cuerpo y las entidades que deseen participar como miembros podrán hacerlo a través de un punto de entrada único: un portal Web dedicado al Cuerpo Europeo de Solidaridad.
La las prácticas durarán entre dos meses y un año. En el caso de contratación laboral, el período mínimo será de cuatro meses.
El Cuerpo Europeo de Solidaridad se establecerá lo antes posible, en cuanto el portal empiece a funcionar. El objetivo es llegar a 100 000 jóvenes incorporados al Cuerpo Europeo de Solidaridad de aquí a 2020.
¿Quién puede incorporarse a la UE y cuáles son los criterios?
Cualquier persona en Europa menor de 30 años es bien recibido en el Cuerpo Europeo de Solidaridad, independientemente de sus antecedentes y de que esté estudiando, formándose, trabajando o en situación de desempleo. Las prácticas han de ser accesibles a una amplia gama de perfiles, desde jóvenes que abandonan prematuramente los estudios a los titulados de la enseñanza superior que ya puede que tengan experiencia en laboral.
Tal como sugiere su nombre, el Cuerpo Europeo de Solidaridad se basará, en primer lugar, en el valor de la solidaridad. Los jóvenes que deseen convertirse en miembros del Cuerpo Europeo de Solidaridad tendrán que consagrarse a la misión como parte de la inscripción, declarando su compromiso y su voluntad de emprender actividades solidarias una vez que se hayan puesto en relación con una organización o hayan sido aceptados como voluntario.
Si bien la práctica no puede garantizarse al realizarse la inscripción, de los múltiples retos — y la consiguiente amplia gama de cualificaciones necesarias para responder a los mismos, se desprende que se necesitará una gran variedad de perfiles profesionales.
¿En qué tipo de actividades participarán los miembros del Cuerpo Europeo de Solidaridad?
Los miembros del Cuerpo Europeo de Solidaridad pueden participar en cualquier tipo de actividad relacionada con la prevención de catástrofes y la respuesta a largo plazo, así como actividades para hacer frente a retos sociales, como la exclusión social, la pobreza, los desafíos sanitarios y demográficos, o actividades destinadas a hacer frente a la crisis de los refugiados.
El régimen podría, por ejemplo, respaldar el desarrollo social, la asistencia sanitaria y los servicios de rehabilitación para las personas en riesgo de caer en la pobreza y la exclusión social, como los gitanos, las personas con discapacidad, determinados grupos de inmigrantes y otras personas que sufren discriminación y los prejuicios.
Se excluye una reacción inmediata ante las catástrofes, por ejemplo la lucha contra incendios forestales o de búsqueda y rescate en zonas urbanas, porque estas actividades requieren especialistas altamente cualificados. No obstante, si un municipio rural quiere reducir al mínimo el riesgo de incendios forestales, por ejemplo, limpiando los matorrales, los miembros del Cuerpo Europeo de Solidaridad podrían aportar una valiosa contribución.
¿Dónde se desplegarán los miembros del Cuerpo Europeo de Solidaridad y por cuánto tiempo?
Los miembros del Cuerpo Europeo de Solidaridad puedan desplegarse en su país de origen o en otro Estado miembro de la UE, en función de las necesidades de las entidades participantes y del perfil y de las preferencias del mimbro del Cuerpo Europeo de Solidaridad.
¿Qué organizaciones pueden participar?
Las ONG, las autoridades locales o empresas privadas dedicadas a hacer frente a situaciones difíciles pueden utilizar el portal para contactar y reclutar a miembros del Cuerpo Europeo de Solidaridad.
Todas las organizaciones que participan en actividades de voluntariado necesitan estar en posesión de una acreditación válida que garantice su conformidad con la Carta del Servicio Voluntario Europeo para garantizar que respeten las normas de calidad necesarias
¿Se pagará a los participantes?
Si se contrata a una persona como empleado normal, becario o aprendiz en otro Estado miembro, recibirá un salario (en caso de contrato de trabajo) o una asignación (en caso de formación o aprendizaje profesional) que cubra los gastos de subsistencia y viaje y que puede recibir el apoyo financiero, por ejemplo, del Sistema de Garantía Juvenil.
Si la persona acude como voluntario, los principales costes de la participación de los voluntarios (es decir, alimentos, alojamiento, gastos de viaje) están cubiertos mediante la subvención concedida a la organización a través Servicio Voluntario Europeo.
El voluntario recibirá además dinero de bolsillo, cuyo importe estará en función del país de servicio. Además, todos los voluntarios estarán cubiertos por el seguro colectivo del Servicio Voluntario Europeo establecidos en dicho régimen.
¿Cómo se financiará esta iniciativa?
Los costes financieros derivados de la movilidad transfronteriza y la estancia en el extranjero se verán ampliamente compensados por la ayuda de la UE, en virtud de estructuras ya existentes, como el Servicio Voluntario Europeo y el Sistema de Garantía Juvenil.
¿Qué supone para las ONG, las empresas o las autoridades locales participantes?
A través del Cuerpo Europeo de Solidaridad, todas las empresas, organizaciones no gubernamentales y autoridades locales que busquen trabajadores, becarios o voluntarios para proyectos solidarios, puede tener un sistema fácil de acceso único a información, servicios de colocación y contratación. Además, el conjunto de jóvenes motivados tendrá una extensión mucho mayor que el radio local o nacional.
Además, ya que todos los jóvenes inscritos en el Cuerpo Europeo de Solidaridad deberán declarar su compromiso con la misión del Cuerpo Europeo de Solidaridad y demostrar su motivación, las organizaciones y las empresas podrán preseleccionar de manera más fácil y rápida a aquellos que mejor se adapten a la cultura de su organización y sus necesidades específicas.
Posibles ejemplos
Croacia - una organización que trabaja en una zona postconflicto acoge a un número de voluntarios procedentes de varios Estados miembros de la UE. Se encargan de la organización de actividades para jóvenes de distintas comunidades para ayudarles a convivir pacíficamente. El hecho de que los voluntarios no proceden de la región hará que sean más aceptables para ambas comunidades y permite un mayor impacto.
- A raíz de un vertido de petróleo en el Mar del Norte, una joven ciudadana danesa irá a ayudar a una autoridad local sueca en la zona más afectada durante un período de nueve meses. Ayudará al municipio en el saneamiento de las zonas y la rehabilitación de los animales. Su alojamiento, comida y los gastos de viaje, así como un seguro y dinero de bolsillo, se pagarán por el Servicio Voluntario Europeo a la autoridad local.
- Previa consulta a su asesor en su oficina de empleo local, un joven trabajador social griego de Atenas acepta una oferta de trabajo en un centro de acogida de refugiados en Salónica. Aunará fuerzas durante los próximos ocho meses con un equipo de psicólogos, asistentes sociales y profesores para ayudar a los niños refugiados a adaptarse a su nueva realidad. Recibirá un salario mensual neto, así como una dieta mensual de 200 EUR para cubrir los gastos de estancia y de movilidad.